sábado, 23 de febrero de 2013

Beatriz...




Después de tanto tiempo, no puedo evitar sentirme como el primer día. En mi mente no aparecen otras palabras que no sean  tu nombre, Beatriz,… Beatriz. Despertarme a tu lado es un placer, sentir tu calor junto a mí. Una caricia tuya hace brotar en mí tantas sensaciones, tú eres fuego y tranquilidad. Tú, solo tú. 

Agárrame, esta vez me dejare caer, tú serás la que me salvarás, lo sé. Tu mi luz y mi oscuridad, tan necesarias. Tú le das la forma y volumen a las cosas y principalmente a mí, sobre todo a mí. 

Estar a tu lado, ya sabes que es mi paraíso. Que algún día te contaré, y entonces entenderás. Hoy solo quiero estar a tu lado, sentir que me miras con esos ojos marrones que me llevan a la locura.
                                    
                  Morena, hoy no te escapas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Desde el minuto cero dinamitaste mi razón
poco a poco pedazos de mi fueron abandonando mi cuerpo
para llegar a ti y quedarme contigo, allá donde vayas, siempre.

A veces voy a la deriva,
y tú eres quien me ayuda a encontrarme,
no dejes que me pierda,
si sueltas mi mano, dejaría de ser yo.
Tus secretos y los míos, se conocen y protegen porque ya son nuestros.
En tu cuerpo encuentro mi cálido refugio,
rodeada por tus brazos, tú eres mi hogar.

Tu locura y la mía, se afinan en perfecta melodía.